La obesidad es una enfermedad

Actualmente la obesidad es una enfermedad muy común en los animales de compañía, y es vital poner solución.

La obesidad ocurre cuando hay una acumulación de grasa en los tejidos adiposos. Se produce generalmente porque nuestra mascota ingiere más calorías que las que desgasta con su actividad diaria, y este  desequilibrio se almacena en forma de grasa. Este exceso es insalubre para nuestra mascota, ya que tiene más posibilidad de padecer muchas enfermedades, como: patologías pulmonares y cardiovasculares, su capacidad locomotora, la intolerancia al calor, intolerancia al ejercicio, artrosis, diabetes…etc. La obesidad es muy peligrosa, por todos estos motivos, y  porque acaba siendo complicado corregirla, ya que nuestra mascota cuanto más obesa está, menos quiere moverse, y entonces engorda un poco más…etc.

Como sabemos si nuestra mascota está obesa?

Primeramente nos vamos a dar cuenta por su aspecto físico, y por ello, apreciaremos que no tiene las mismas ganas de jugar, ni correr, ni pasear, etc. En el caso de los gatos, se suele acumular la grasa en la parte baja del abdomen. En el caso de los perros, en el tronco, barriga y pecho.  Podemos considerar que un animal está normal si le podemos palpar las costillas, y también si podemos visualizar la cintura marcada.

Que le está provocando a mi mascota la obesidad?

Dependiendo de cada caso puede ser por diferentes causas, pero generalmente las causas suelen ser:

Que el alimento que se le da a nuestra mascota no sea el más indicado, dependiendo de su edad, tamaño, actividad física, etc.
Que en casa se le den restos de nuestra comida por costumbre; haciendo esto aportamos una cantidad de calorías a nuestra mascota muy por encima de la que debe ingerir a diario.
Que tenga el alimento “ad libitum”, es decir, siempre a su disposición.
Que le demos excesivos premios y chucherías.
Porque nuestra mascota lleve una vida demasiado sedentaria y realice poco ejercicio;  así aunque coma poco si no lo quema físicamente difícilmente vamos a poder controlar su peso.
No hay que descartar que pueda tener algún problema endocrino, como hipotiroidismo e hiperadrenocorticismo (o Síndrome de Cushing). Los problemas endocrinos son más frecuentes en perros de edad más avanzada y en determinadas razas que son más propensas a sufrir estas alteraciones (como el Golden Retriever, Bulldog inglés, Setter irlandes, boxer, Caniche, etc).
Si nuestra mascota está castrada, tiene más predisposición a sufrir obesidad, pero si lleva una alimentación adecuada ajustándose a su peso y realiza suficiente ejercicio físico, no tiene porque estar obesa.

Como puedo solucionarlo?

En primer lugar lo más importante para que pierda peso es que  nuestra mascota  ingiera menos calorías y aumente el gasto energético. Si en casa hay varios miembros, se deben poner unas reglas para que todos ellos las cumplan, porque si hay miembros de la casa que cumplen la dieta de nuestra mascota, y otros no (le dan restos de comida, etc), no conseguiremos nada.
La dieta hay que cambiarla, y sustituirla por las que están ya preparadas para perder peso; estas dietas son pobres en grasa y calorías, y ricas en fibra. También está la posibilidad de alimentar a nuestra mascota con una dieta casera, pero si preferimos ésta opción, debe llevar una dieta elaborada por el veterinario para que no sufra ningún déficit. Siempre administrar la cantidad adecuada dependiendo del peso de nuestro perro, gato, etc. Para que ésta dieta sea lo más efectiva posible debemos combinarla con unos largos paseos diarios de forma regular, jugar un ratito con alguna pelota (dependiendo del estado del animal), aumentar el ejercicio físico adecuándolo a cada animal de forma regular y constante. En el caso de los gatos, incitar a que juegue, con juguetes nuevos, túneles, árboles rascadores,  juguetes huecos en los que se introduce alguna bolita de pienso,etc…
Si queremos premiar algo a nuestra mascota, podemos sustituir la golosina por un trocito de zanahoria o brócoli, esto les encanta y es mucho más saludable.

Una vez que consigamos la pérdida de peso deseada de nuestra mascota, no debemos dejar los hábitos establecidos, si no que llegados a este punto pondremos una dieta de mantenimiento (para evitar que vuelva a engordar) repartido en dos veces al día. continuaremos con el programa de ejercicio que hemos estado realizando a diario y suprimiremos dar restos de comida, golosinas, etc…cambiandolo por zanahoria, brócoli, apio, etc. estos hábitos son para siempre, y así podremos ofrecer a nuestro fiel compañero una vida saludable y feliz.

En la actualidad la obesidad está siendo uno de los mayores problemas de  malnutrición que padecen los animales de compañía. Si detectamos que nuestra mascota sufre sobrepeso u obesidad, no hay que dejarlo pasar, porque las consecuencias pueden llegar a ser muy graves; hay que poner solución, y con un poco de disciplina por nuestra parte y visitando al veterinario para que nos ayude y nos enseñe las pautas a seguir, él llevará un seguimiento del peso del animal y controlará que el programa de pérdida de peso se esté realizando correctamente y sin ninguna deficiencia para nuestra mascota. El ejercicio moderado y una buena alimentación es la base de la mayor parte del bienestar tanto de nuestra mascota como nuestro.