Sí a la quimioterapia en el perro y el gato

Uno de los efectos secundarios de la quimioterapia contra el cáncer en personas es la alopecia o caida del pelo sobre todo a nivel cefálico, pero en pequeños animales, al contrario de lo que la gente piensa es raro u ocurre en muy pocas ocasiones o solo cuando los protocolos de quimioterapia exigen que se prolongue en el tiempo.

Nunca veremos un perro calvo como consecuencia del uso de estos fármacos, cuando para muchas personas, dueñas de animales con cáncer es la primera cosa que se le viene a la mente y limita la aplicación a los animales o deciden por la eutanasia de los mismos sin justificación.

La quimioterapia en veterinaria tiene muchas ventajas y se logran en muchas ocasiones buenos resultados y una prolongación de la calidad de vida de los animales.

Hemos de recordar que prologar esa calidad de vida un año más, tiene su equivalencia en proporción a la escala de vida en personas unos 5 o 7 años más.

Obviamente dependerá del tipo de cáncer, de su localización, extensión, sintomatología y grado de dolor, siendo éste el síntoma más importante a tratar para seguir disfrutando de la alegría y juegos de nuestro animal de compañía.

Solo algunas razas pueden perder parcialmente el pelo o caerle a mechones ( pastor alemán, caniche, Maltés, Shih tzu, Lasso Apso, Bobtail, Yorkshire…), el resto de razas no se ven afectados o a lo sumo tener caida de sus bigotes o un moderado retraso en el crecimiento del pelo.

Los vómitos, otro factor en contra a la hora de sus propietarios decidir por la quimioterapia, tampoco ocurre en demasiados animales, solo en el 20% de ellos, en nuestra experiencia y siempre controlable con medicaciones específicas para prevenirlos.

Entre las ventajas y aplicaciones que tiene la quimioterapia en veterinaria tenemos:

-Aplicarla cuando hemos extirpado un tumor maligno y evitar o reducir los riesgos de aparición de metástasis a distancia o recidivas locales ( es decir limpiar las posibles células malignas que hayan podido quedar tras la cirugía).

Reducir el tamaño de tumores, que por su localización o riesgo impiden su cirugía inicial, pero que tras varios tratamientos daría muy buenos resultados y permitiría una buena extirpación quirúrgica.

-Aliviar el dolor y otros signos cuando haya presencia de múltiples tumores inoperables o metástasis en múltiples órganos como el pulmón.