La imagen que se muestra a continuación es típica después de que el flebotomo pique y deposite Leishmanias en la piel.
Se aprecia una zona ulcerada con bordes elevados que se asemejan al cono de un volcán. Normalmente suele aparecer en zonas libres de pelo como el interior de las orejas, alrededor de la trufa, en la zona urogenital o bajo vientre, que es donde más suele picar el flebotomo. Cuando se aprecien estas lesiones hay que acudir al veterinario para que le realicen una prueba y confirmar o descartar la presencia del parásito para poner en tratamiento, cuanto antes, a nuestra mascota en caso de confirmarse su presencia.